miércoles, 26 de junio de 2013

UN AÑO EN LA BABÍA


para Cecilia, nuevamente 

Esa mano que busca
la mía, y nos dormimos; 
esa pieza en que nada 
incomoda o disuade; 
y la casita enclenque,
que vamos mejorando; 
y el jardín en que el perro 
hace pozos y ladra: 
marcas de un tiempo sabio
en el fondo, aunque a veces 
nos apuremos, presas
de un medroso cariño.
Piedras francas y briznas 
que regamos deseosos, 
el tiempo nos desgasta 
y seguimos sonriendo. 
Piedra/brizna que cuido  
como brasa de junco, 
esa mano que busca
mi mano por las noches
es el mayor tesoro, 
el más hondo sentido. 

jueves, 20 de junio de 2013

POR UNA CERVEZA

Qué sería, chiquita, 
que por una cerveza 
buscada, y es rutina, 
después de medianoche
por calles sin un alma 
te causara un disgusto. 
Cierre de la jornada, 
la cerveza es mojón
de libros que por horas
me acompañan. Ahora 
te levantás, mimosa 
cargoseás al Lagarto 
--que no se hace problema 
ni mucho menos-- y 
me decís frasecitas 
amanecidas. Amo 
tu despertar. Macana 
sería que un puntazo
terminara con esto. 
Cómo quisiera que 
las calles fueran algo 
con corazón, o casa 
abierta a todos. Nadie 
nos sonríe en la noche.
Yo volveré a salir. 
 

sábado, 15 de junio de 2013

FATAL

Acabo de perderte. 
Noche del corazón, 
ahora te entreveo: 
indiferente, plena, 
sucesora de nada. 
Clausurado, vaciado
de lejos gesticulo: 
y mis muecas se agotan 
ante un espejo sordo 
y prepotente que, 
inapelable, anula 
este armonio quebrado, 
sus notas, su pedal. 

jueves, 13 de junio de 2013

TÍO CARLOS

Entender. Ser, más bien,
un entendido. Docto 
que diserta --paciente, 
clemente-- frente a un niño. 

Ser otro. No desairo 
aún tal imposible, 
por más que se me muestre 
impracticable, odioso. 

Porque también en mí 
algo se enerva cuando 
me fuerzo al anhelar 
esa impostura o mueca. 

Mueca o tic de empeñado 
en llamar a aquel muerto 
que alguna vez me alzó, 
que me enseñara Morse.

(Y abrir la Enciclopedia, 
y ver todos los puntos 
y las rayas, y ya 
no poder aprender...) 

viernes, 7 de junio de 2013

ESA PIEL

Último padecer, 
hacés que los poemas
pretendan formas claras 
que regalás sin más 
al estulto vecino; 
las previas fueron cruces
en los helados muros
de una casa que nunca 
fue tuya. En ella luego
amaste y te olvidaste 
del sentido de arar 
para los otros: poco,
huero fruto mordías
entre tus labios. No 
podemos permitir 
que repitas exangüe: 
"la poesía ha muerto". 
Tu corazón, tu viejo
corazón de negar, 
pierde esa piel ahora. 
No temas, que mañana 
vas a apartar juicioso
a todo aquel que exija
lo que sólo a vos toca
de tu propia visión. 

lunes, 3 de junio de 2013

AHORA QUE TODO NOS DESLUMBRA

Tiempo para mi madre. 
Y los vasos se ensañan 
en los manteles últimos. 
Y ella ya no comprende 
que comienzo a entreverla. 
Muñeco de hilos dulces 
que destripamos pronto. 

Tiempo para mi madre. 
Acompañarla ahora 
que todo nos deslumbra. 
Conciso testimonio 
el temblor de sus manos 
de aljibe. Ya se aleja:
destrozada, menor.